“Influencer” es una palabra que está de moda. Todos quieren ser Influencers o todos quieren relacionarse con ellos.
El motivo es sencillo. Si eres un Influencer tienes la capacidad de llegar a los demás. Tienes la capacidad de dejar tu mensaje.
Si te relacionas con ellos, tienes la esperanza de hacerlo indirectamente. De alguna forma, esperas que sean tu “tipping point” particular. Que funcionen como tus altavoces.
Al final, da lo mismo el objetivo. Los Influencers son interesantes porque son la puerta a las masas.
Hay vida fuera de las redes sociales
Por lo general, la gente los busca en las redes sociales. Bueno…es fácil. Hay muchas herramientas. Tienes perfiles. Interpretaciones. Te puedes hacer una idea muy completa de la persona que estás analizando.
No está mal. Las herramientas pueden ayudarte. Pero me da la sensación de que el perfil que vas a conseguir tiene algo de cartón. Funciona como una fórmula matemática. Tantos seguidores en twitter… Likes en Facebook por encima de… Comentarios en el blog que…
Las redes sociales son importantes. Te dan una idea de conexión. Eso es lo que diferencia a los Influencers de los demás.
Yo te propongo otra forma de verlo. No es mejor, es diferente. Deja de lado las redes sociales y céntrate en otros elementos.
Primero lo primero
No creo que exista influencia si no hay nada que decir. Lo primero es el contenido. ¿Qué contenido? Contenido de calidad.
Es difícil decir qué tiene calidad o no. La calidad es un tema de percepciones. Subjetivo. Quizá, podemos hacer aproximaciones.
El contenido de calidad tiene dos componentes. Qué dices y cómo lo dices. No hay más secreto.
No repitas lo que se ha contado miles de veces. ¿Qué sentido tiene repetir un post que ya se ha escrito? Dale tu enfoque. El contenido de calidad no inventa constantemente. Nadie puede hacerlo. Pero aporta siempre una manera personal de ver las cosas.
El cómo es importante. Busca a gente que dice las cosas con su estilo. Que tiene una voz única. La forma nos diferencia. Nos posiciona. Y nos ayuda a conectar.
Los Influencers tienen relevancia
El tamaño es fundamental. Calidad sin tamaño no es una buena combinación para llegar a ningún mercado.
En este caso, el tamaño de la audiencia marca diferencias. Alexa te puede ayudar. Hay otras herramientas, pero Alexa funciona. Lleva mucho tiempo funcionando. Su ranking de sites basado en visitantes y páginas vistas es sencillo, pero muy potente.
Asegúrate de que tu Influencer tenga una posición destacada. ¿Cuál? No lo sé. Depende del nicho en el que te muevas. Nichos más populares te permiten mejores rankings que otros nichos más pequeños y con menos probabilidades de atraer al gran público.
Tienes que investigar un poco. Comprueba que posición tiene y que posición tienen otros que compiten en el mismo nicho. Ésa es una buena forma de entender la posición de un influencer.
El potencial te dice mucho
Hay una manera sencilla de saberlo. No es científica. No es exacta y seguramente es opinable. A mi me gusta.
Pon el nombre del Influencer entre comillas y búscalo en Google. El resultado te da muchas pistas. Te dice el número de páginas que contienen el nombre exacto que has introducido entre las comillas.
Es como una especie de mancha publicitaria del Influencer. El ADN de su potencial. Cuanto más grande es el número, más grande es tu mancha publicitaria. Más probabilidades de que todo ese ruido se convierta en tráfico o en cualquier otra variable importante en el futuro.
El sistema tiene un fallo. Cuando el nombre de tu Influencer es muy común, los resultados no son muy fiables. Es probable que incluyan varias personas.
Los influencers con autoridad valen más
La idea es simple. Cuando uno tiene la capacidad de llegar a muchos, la autoridad multiplica la intensidad de la influencia. Más autoridad, más influencia. Menos autoridad, menos influencia. Simple.
Un buen sitio para reconocer la autoridad es Amazon. Puedes chequear qué ha publicado. Qué piensan sus lectores de sus libros. Cómo se están vendiendo…
El libro es un elemento mágico. Si has escrito alguno, eres un experto. Si se está vendiendo bien, te conviertes en un gurú. ¿Es correcto? Seguramente no, pero así es como funciona.
La prueba definitiva
No sé si es definitiva, pero creo que es la que tiene más peso. También es la menos transparente.
El tamaño de su lista de emails tiene una fuerza increíble. Todo lo que has analizado hasta ahora está bien, pero le falta algo. Conversión.
Su lista es una prueba evidente de su conversión. Es una prueba evidente de cómo mueve a la acción a la gente. En definitiva, eso es influencia.
Este dato no suele ser público. No tiene nada que ver con sus listas de seguidores. Tampoco tiene que ver con sus feeds. No tiene nada que ver con nada que no controles al 100%.
Hay tres elementos que te pueden dar una idea. Cómo recogen los correos, cuántas veces se ponen en contacto contigo y cómo lo hacen.
Si sus webforms están visibles siempre y están colocadas en sitios estratégicos de su site (ángulo superior derecho,…), lo hacen bien. Si se ponen en contacto contigo con una frecuencia que parece planificada, lo hacen bien. Si encuentran un equilibrio entre información de valor y venta, lo hacen bien.
Al final no tendrás un número, pero podrás comparar entre los distintos influencers quiénes tienen más probabilidades de tener una lista mayor.
Convertirte en un Influencer está bien. Relacionarte con ellos y buscar oportunidades conjuntas está bien. Puede ser un punto de inflexión. Ellos son los que tienen el contacto con el mercado y tienen la capacidad para moverlo. Punto.
Salvador Figueros
Foto: cambodia4kidsorg / flickr